Uno de los juegos favoritos de los niños es hacer carreras. Retar a los adultos a pruebas de velocidad es una diversión sin igual. Pero, para los padres, esto puede acabar siendo realmente agotador. ¿Te gustaría seguir el ritmo de tus hijos pero te sientes cansado? La solución es retarles con juegos de mesa de carreras.
Para los niños ser el primero en algo es un gran aliciente para realizar cualquier actividad. No te será difícil convencer a tus hijos de lo divertidos que son los juegos de mesa si les dices que el objetivo es llegar el primero a la meta. Con sólo ese dato, los tendrás sentados a la mesa esperando a empezar la partida. En este artículo te presentamos tres juegos de mesa de carreras que encantarán a tus hijos y no terminarán con todas tus energías.
Juegos de mesa de carreras para jugar con tus hijos y no acabar sudando
La escalera encantada
La escalera encantada es un juego que introduce la emoción de la carrera en una temática fantasmal. ¿Qué pasaría si tuviéramos que correr una carrera cubiertos con una sábana?
La mecánica de este juego es tan sencilla que pueden jugar niños de hasta tres años de edad. Se trata de una dinámica tradicional, basada en el lanzamiento del dado y el movimiento de peones tantas casillas como se indique. El objetivo de los jugadores es que su peón alcance la más alta torre del castillo antes que el resto. Para ello, tendremos que frotar bien las manos y conseguir un buen número en el dado, que nos permita hacer avanzar a nuestro peón el máximo número de casillas posible.
Hasta aquí, todo parece habitual, un juego de mesa de azar como cualquier otro. Sin embargo, ¡no va a ser tan fácil! En La escalera encantada el dado está trucado: los números 5 y 6 han sido borrados y sustituidos por dos fantasmas. ¿Qué pasa si nos sale un fantasma? Tendremos que cubrir nuestro peón con una sábana blanca y continuar así el resto de la partida. Si, una vez hecho esto, vuelve a salirnos el fantasma, podremos cubrir el peón de un contrincante. ¿Y si todos están cubiertos? Entonces se nos permitirá intercambiar los fantasmas entre ellos.
A partir de este momento es donde empieza la verdadera diversión del juego. Puede que nuestra carrera se convierta en interminable si en lugar de avanzar, retrocedemos. ¿Crees que serás capaz de distinguir tu peón si todos están cubiertos por sábanas? Cuidado y no te confundas al mover, porque el peón que consiga alcanzar lo alto de la escalera habrá ganado la partida.
El festín de las moscas
Este juego de mesa de carreras tiene todos los ingredientes para hacer reír a los más pequeños: moscas y estiércol. El festín de las moscas es un juego de mesa un poco escatológico, pero tremendamente divertido.
El olor del estiércol en mitad del jardín está atrayendo a las moscas, que se dirigen hambrientas hacia él. Sin embargo, sólo las primeras en llegar podrán disfrutar de tan rico manjar. ¿Crees que conseguirás llegar antes que las demás?
Este juego está regido por un mazo de cartas, que indicarán a cada jugador las acciones que puede realizar con sus moscas. Cada uno de los jugadores tendrá que guiar a cuatro moscas al festín. El que consiga que todas ellas lo alcancen, habrá ganado la partida. Según las cartas que obtengamos, podremos avanzar hacia nuestra meta o sabotear a nuestros rivales usando, por ejemplo, el matamoscas.
Lo mejor de este juego, sin duda, es que podemos cambiar el tablero a nuestro antojo cada vez que juguemos. Formado por varias losetas hexagonales, el tablero de El festín de las moscas cuenta con un punto de aterrizaje fijo, el estiércol. Una vez colocado éste al final del camino, podremos situar los demás donde queramos, configurando un tablero diferente en cada partida.
Si quieres que tus moscas sean las que se coman todo el “pastel”, ¡ponte las pilas para llegar el primero!
Erizos a la carrera
Los erizos también están hambrientos. En Erizos a la carrera el festín serán unas deliciosas manzanas. Pero, el camino hasta ellas no va a ser fácil. Aunque es un juego sencillo, apto para cualquier miembro de la familia, su reglamento esconde muchas sorpresas que pueden cambiar nuestra posición en el pódium final.
Para avanzar, estos erizos necesitarán cartas del mismo color que su pelaje. A través de dichas cartas, haremos que los erizos se acerquen cada vez más a las manzanas. Y empezamos con las sorpresas: podemos hacer avanzar a cualquier erizo. En este juego no se asigna un meeple a cada jugador, sino que todos podrán mover a cualquier erizo del tablero.
¿Entonces cómo sabremos quién es el ganador? Esto también tiene truco. Una partida está formada por tantas rondas como jugadores haya. Cada ronda finaliza cuando un erizo alcanza la meta. En ese momento, debemos contar la puntuación obtenida con las cartas. Cada jugador anotará sus puntos y empezaremos la siguiente ronda. Al final de la partida, el jugador con mayor puntuación se proclamará ganador.
Como ves, hay que ser un buen estratega y descartarse de las cartas que puedan traernos un mal resultado en caso de que algún erizo alcance la meta. ¡No todas las cartas suman puntos! Debes tener cuidado para no acumular las que puntúen en negativo.
Sin duda, Erizos a la carrera es uno de los juegos de mesa de carreras más completo, pues el camino hacia la meta no es tan obvio como parece. Esto mantendrá en vilo no sólo a los más pequeños, sino también a los adultos que tendrán que poner todas sus energías en hacer los movimientos correctos durante la carrera.
Si correr no es lo tuyo, pero te encanta jugar con tus hijos, estos juegos de mesa de carreras van a ser tu panacea. Son juegos muy dinámicos, con normas sencillas y aptos para toda la familia. Pero, ¡cuidado! También te darán agujetas… no de correr, sino de reírte. ¡Entra en nuestra tienda y consigue ya el que más te guste!